El orgullo gay se celebra con festivales en un gran número de ciudades alemanas como Berlín, Múnich, Frankfurt y Colonia. El evento gay más importante es el Cristopher Street Day, que atrae a más de 400.000 festeros, y se celebrado entre junio y julio. Otra fiesta importante es la famosa Love Parade. El carácter abierto del pueblo alemán también se refleja otras cosas como la legalización de la prostitución, las áreas nudistas en parques y los cines porno.

Pero no siempre fue así, hace años los gays no eran aceptados, hasta la creación del Comité Científico Humanitario, que luchó por derechos de los gays, contra la opinión de que la homosexualidad era un trastorno. Su fundador, Dr Magnus Hirschfeld, hizo campañas para el reconocimiento de gays bajo la teoría "la homosexualidad no es un trastorno, es un tercer sexo". Gracias a las campañas del Dr Hirschfeld, Alemania es una de las grandes mecas del movimiento gay.

Las ciudades más grandes de Alemania tienen prósperos ambientes gays, y cuentan con un gran número de bares, clubs, cafeterías, saunas y restaurantes especialmente dirigidos al público gay. Por ejemplo, se estima que Berlín tiene una población gay y lesbiana de un cuarto de millón de habitantes, y su ambiente gay es para todos los gustos.